El acto de batir cabeza, tal vez
sea la parte del ritual umbandista cuya simbología esté en el inconsciente colectivo
de la humanidad desde el principio de los tiempos.
El acto de llevar la cabeza al
suelo es encontrado, prácticamente, en todas las religiones.
Podemos interpretar este acto
como el reconocimiento de la sumisión del ser humano delante de la omnipotencia
de la Divinidad.
O sea, la aceptación de nuestras
limitaciones delante de aquello que no podemos controlar.
Se trata, por lo tanto, de una señal
de respeto y de entrega así como de humildad y agradecimiento.
En la Umbanda batir cabeza
significa respeto por los orixás, guías y entidades que son representadas por
el congal.
En algunas casas también se bate cabeza tanto en los
puntos de fuerza o energía (los atabaques )como también para los sacerdotes sacerdotisas o los más
viejos en la religión.