jueves, 29 de marzo de 2012

PLEGARIA DE EXÚ




Soy EXÚ ,Señor.
Padre, permite que así te llame.
Pues en  realidad, Tú eres, mi creador.
Me formaste de la poeira, pero como todo que provienen de ti, soy real y eterno. Permite, Señor, que yo pueda servirte en las más humildes y despreciables tareas creadas por tus hijos humanos.
Los hombres me tratan de ángel caído, de traidor, de rey de las tinieblas, de genio del mal y de todo más en que encuentran palabras para expresar su desprecio por mí.
Sin embargo, ni sospechan que nada más soy el reflejo de sí mismos.
No reclamo, no me quejo, porque esta es tu voluntad .
Soy desterrado, soy condenado a habitar las profundidades oscuras de la tierra y a transitar por las hendiduras tortuosas de la desolación .
Soy invocado por la inconsciencia de los hombres, a perjudicar su semejante.
Soy usado como instrumento para aniquilar aquellos que son odiados, movido por la cobardía y maldad humanas, sin, que pueda negarme a recurrir.
Por el pensamiento de los inconscientes, soy arrastrado a ejercer la incredulidad y la discordia, pues, esta es la condición que tú me impusiste.
No reclamo, Señor, pero quedo triste por ver tus hijos, que creasteis a tu imagen y semejanza, que sean envueltos por el torbellino de iniquidades, que ellos mismos crean, y yo, por tu inflexible gana, de ellas tengo que participar.
Sin embargo, Señor, en mi infinita pequeñez y miseria, como me siento grande y feliz, cuando encuentro en algún oasis de amor  pues soy solicitado a ayudar, en la prestación de una caridad.
Acepto sin quejarme , Señor, la ley, que en tu infinita sabiduría y justicia, me impusiste, a ejecutar de las conciencias, pero, lamento y sufro más porque los hombres, hasta hoy, no consiguieron comprenderme.
Te pido, ó Padre infinito, que los perdone.
Te pido, no por mí, pues tengo que completar el ciclo de mi creación , pero por ellos, tus hijos humanos.
Perdónelos, y hágalos buenos, porque solamente a través de la bondad de tu corazón, podré sentir la vibración de tu amor y la gracia de tu perdón.

viernes, 23 de marzo de 2012

El agua y el fuego




Lagrimas de angustias en un tiempo no esperado por mí:
Volví a mi pasado, fui bondadoso y no pequé mucho  No fui un modelo de persona pero intenté ser lo máximo para mis hijos Pensé en renunciar a todos, pero retrocedí  pues ellos necesitan de mí: Pensé como es fácil la vida de los otros pero  nada sabía a respeto Pensé en quien sufría más que yo, entonces encontré la respuesta cuando mi lagrima se cayó encima de la vela.
Sentado a mi frente un dulce viejecito, con una pipa agarrada por las manos trémulas, sus callos eran mayores que mi dolor, me decía suavemente, porque lloras mi hermano querido?, no tengas miedo o dolores pues estas en la casa de Dios:
Lloré mucho con lastimas como usted, pero de nada adelantó, enflaquecí mis músculos cuando joven en las amarguras de la revuelta, pero aún de nada adelantó, reposé en locales duros, mi cuerpo sintió el dolor, lloré y nuevamente de nada adelantó, vi que mis amigos morían  de añoranzas y lloré, pero aún de nada adelantó, cuando todo acabó yo encontré a Cristo allí vivo en mi frente, ay entonces percibí que de todo adelantó.
Su lagrima que se cayó encima de la vela, fue tan humilde que no la apago , pues a llama contenida en ella es igual a la de su corazón, tienes sentimientos, y recoges la verdad, pero su cuerpo sufre sin comprensión, pues tu venís a busca  refugio de su alma cansada, pero olvida de abrigar lo más importante la Fe en nuestro DIOS

jueves, 15 de marzo de 2012

Cuando comenzamos a recorrer el camino espiritual




Cuando comenzamos a recorrer el camino espiritual, buscamos la perfección en nuestras vidas.
Tratamos de mejorar nuestro carácter, costumbres, ideas, alimentación y hasta la vida social.
A  veces, hacemos sacrificios con la finalidad de alcanzar una vida más llena y feliz; sin embargo, muchas veces no llegamos al estado de éxtasis o plenitud que deseamos.

La decepción puede llevarnos a rechazar la disciplina que habíamos emprendido o, en el peor de los casos, puede desmoralizarnos hasta el punto de pensar que “Dios se olvidó de nosotros”.Cualquiera que sea la reacción, está sólo mostrándonos que cometemos un error. Y un error puede ser corregido.

El Universo funciona como un gran ordenador: es preciso saber tocar en las teclas adecuadas para obtener lo que se desea.
Cuando no lo estamos haciendo, el ordenador se detiene, espera fría y silenciosamente la señal eléctrica correcto.

lunes, 12 de marzo de 2012

 

Nunca desvalorices a nadie
Guarda cada persona en tu corazón
Porque un día tú te puedes acordar
Y percibir que perdiste un diamante , cuando tú estabas muy ocupado coleccionando piedras.-

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